Resumen
La orientación de las discontinuidades por métodos tradicionales es muy conocido y practicado desde hace muchos años; así como el uso del dispositivo de orientador de testigos desde los métodos: Craelius (Goodman, 1976; ISRM, 1978), Christensen – Huegel (Goodman, 1976; ISRM, 1978), Clay core Barrel (Call et al, 1981) hasta electrónicos que se usan en la actualidad.
De otro lado, existe la metodología de obtener información mediante registro televiewer óptico y acustico; esta técnica se viene practicando más de 20 años en rubro petrolera y minera.
A pesar del conocimiento, equipo adecuado y la experiencia acumulada por años, muchas veces la confiabilidad de los datos obtenidos por método tradicional entra en discusión cuando se busca validar con los datos de televiewer o viceversa.
La información estructural, principalmente la orientación de estructuras mayores y menores que conforman el macizo rocoso, deben ser de alta confiabilidad debido a que estos son datos de ingreso para construir el modelo geotécnico que es la base para el diseño y evaluación de cualquier infraestructura geotécnica a nivel superficial como los tajos abiertos mineros, cimentaciones de grandes infraestructuras y obras subterráneas, desde túneles hasta minería subterránea pasando por los métodos de minado selectivos como el corte y relleno, tajeos por subniveles y métodos de hundimientos.
El objetivo principal de este artículo es que ambos métodos permitan levantar datos geotécnicos de alta confiabilidad. Además, se centra en el desarrollo de mejores prácticas en ambas técnicas.
